Espejo

El espejo de la habitación necesitaba un marco y unos marcos de ventana necesitaban cristal. Pues como la unión hace la fuerza, así quedó el conjunto.
Las tallas están hechas en un trozo de encimera de cocina que también se sentía huérfano.

Caja de reloj-especiero

En mis paseos mañaneros por los habituales lugares del entorno suelo encontrar alguna que otra cosa curiosa  y utilizable. Esta vez la caja de un reloj de pared algo deteriorada y con carcoma. Tras un largo tratamiento descontaminante y tener que rehacer prácticamente toda la puerta pues lo convertí en un bonito y original especiero para la cocina.

Gure Etxea

En euskera: Gure (nuestra) Etxea (casa)
Ubicado en Carthago

Cal Baserri

Cal Baserri. Dicese de la unión de la masia catalana y el caserío vasco.
Talla en madera con pirograbado de un caserío y las montañas de Monserrat al fondo.
Ubicado en Catalonia.

Casa Matitos

Una manta raya muy especial.
Ubicado en la provincia de Huesca.

Caja de caramelos

Seguimos con las cajas. Esta está hecha a retales, me explico. Tenía una vieja alfombra de tiras de bambú, el cristal de unas antiguas gafas de buceo, un pequeño pomo de madera y un opérculo que encontré buceando en la costa de Cartagena. Lo metí todo en la batidora y después de un rato salió esta bonita caja que utilizamos para guardar caramelos (por ejemplo)

Para Ane

Otra cajita mas

Edelweiss

Otra pequeña caja con talla de flor edelweiss en la tapa.

Caja en rama

Una de mis primeras cajas. Tallada en una rama de almendro con un pez luna en la tapa

Bicicleta

En mayo del 2011 me embarqué en la aventura de los diez mil de el Soplao. Un paseito en bicicleta de montaña de 165 km. cuatro mil metros de desnivel y 15 horas con el culo "destrozao". Cuatro mil ciclistas mas los participantes en la ultramaratón, maratón y la ruta a pie "esparramaos" por las montañas cántabras. Una experiencia impresionante e inolvidable.

Mi Ñaa tenía la intención de facerla conmigo pero en el km 25 +/- la embistió otro participante y nada, una fractura en el hombro. Terminé la carrera y decidí regalarle mi dorsal. Y que mejor soporte que una réplica casi a escala del lugar donde fue colocado durante tantas horas.